Cocinando con Elisa, en Neuquén después de diez años
Publicado por Redaccionsur
LA RAZON NEUQUEN - Por Jimena Pollet - Estrenada a mediados de la década del 90 “Cocinando con Elisa” impuso, de inmediato, en el medio teatral a su autora Lucía Laragione con una impactante historia en la que el juego de poder y la perversión asoman como constantes dentro de un ámbito tan cotidiano como es la cocina. Diez años después de su estreno, la pieza de Laragione llega a Neuquén de la mano del grupo Sur Menage bajo la dirección de Gustavo Lioy y las excepcionales actuaciones de Inés Hidalgo (Nicole) y Carolina Hernández (Elisa). Se podrá ver todos los viernes de mayo y junio a las 21.30, en El Arrimadero (Misiones 234).
El espectáculo recrea un espacio de trabajo, una cocina situada en una casona de estancia a mediados del Siglo XX; donde el vínculo que se establece entre sus integrantes, Nicole y Elisa, se basa en el abuso de poder, los celos, la envidia y las frustraciones con las que carga todo ser humano. Otro condimento interesante es el misterio que encierran los personajes.
“Es una obra muy densa, donde las relaciones de poder entre las dos, la violencia física y psicológica que genera el personaje mayor en Elisa son muy fuertes. Lo que se reproduce es la relación de amo y esclavo que hay en toda la sociedad, pero en un ámbito cerrado como es una cocina, donde están las jerarquías de cocinera y ayudante cuando en realidad ambas son empleadas de un patrón común. Normalmente en esos ámbitos de sirvientes hasta se nota más el grado de poder. Por eso lo bueno también de la rebeldía de Elisa que sienta los limites en un momento de la obra”, narra el directo Gustavo Lioy.
“Yo me enamoré de la obra, aunque es muy morbosa, como temática es muy fuerte y es una propuesta actoral y teatral interesante y desafiante”, comenta Carolina Hernández. “En el estreno, que fue el viernes pasado a sala llena, nos sorprendió la diversión morbosa que tuvo la gente, no esperábamos hacer reír”.
“Hay momentos de humor negro, casi rojo, donde la gente se empezó a reír creo que de nervios, algo que nos sorprendió –agregó Lioy-, porque en esta obra no trabajamos para el humor. Igualmente, las valoraciones de las actuaciones y de la mimetización con los personajes, que se mantienen a un nivel muy alto durante toda la obra, fueron muy buenas. Al público le gustó mucho la obra”.
Del humor al morbo
La obra supuso un desafío para el grupo teatral Sur Menage habituado al humor.
“La realidad es que siempre elegimos obras que tienen que ver con lo que yo tengo ganas de decir en ese momento de mi vida”, comentó Lioy. “Siempre metimos esa cosa de comedia dramática o romántica. Ahora cambiamos. Tiene que ver con la necesidad de lo que uno tiene ganas de expresar, yo creo que en el momento que hicimos humor en estado puro como “Niní”, “Las Estúpidas de Siempre” o “A Solas”, tenía que ver con una realidad social que nos rodeaba; y que necesitábamos descargar a través de la risa”.
“En este momento creo que el público se puede bancar una obra más comprometida, con una temática social importante, porque Cocinando con Elisa también tienen una lectura social desde la metáfora de la obra en relación con los años de plomo de la dictadura militar. Entonces me pareció que era el momento para esta obra; pero básicamente la elección fue por la necesidad de crecer del grupo”, añadió el director.
“Personalmente yo como artista –continuó Carolina- trato de trabajar distintas temáticas para no quedarme e ir más allá. El actor necesita ver si es “capaz de” porque eso ayuda a crecer”.
http://www.docuatro.com/larazon/?p=1498
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